El parón político perjudica a las empresas. En el día de la sesión de investidura, el presidente de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged), Alfonso Merry del Val, ha enviado un mensaje claro: «La parálisis política envía una señal de desconfianza hacia un país que se dirige a un estancamiento debido a la inoperancia de sus responsables políticos a la hora de abordar las grandes reformas pendientes», ha dicho.
En su discurso de cierre de la asamblea de este año de Anged, la patronal que representa a empresas como El Corte Inglés, Ikea, Alcampo o Carrefour, Merry del Val ha recalcado que «nos hemos olvidado de uno de nuestros principales problemas estructurales: la baja productividad», que, ha insistido, se traduce en un menor crecimiento de las empresas y en un freno para la inversión y el empleo.
Ha citado el presidente de Anged a Eurostat: desde 2009, la productividad ha avanzado 10 puntos menos que la media europea; y desde 2019 hemos perdido 3,8 puntos de productividad, abriendo una brecha de cinco puntos con los socios de la UE. «18 países de la Unión Europea superan ya la renta per cápita de los españoles, que se sitúa a casi 20 puntos de la media», ha apuntado Merry del Val, que ha reseñado: «No podemos marginar a los empresarios porque son la base sobre la que se construye la riqueza de un país, el pilar de sostener la inversión y los servicios públicos».
La patronal de las grandes empresas de distribución considera que «solo mejorando la productividad de las empresas podemos garantizar un crecimiento sano de nuestra economía a largo plazo, capaz de proveer mejores empleos y proporcionar el máximo nivel de bienestar a sus ciudadanos». La crítica se ha centrado en que el debate político es «confuso» desde hace unos años: «El resultado evidente de esta interminable batalla política y del olvido de la competitividad de las empresas es una parálisis de reformas y un empobrecimiento de nuestra economía», ha recalcado.
Garamendi apunta a la estabilidad
El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha recogido las conclusiones de Merry del Val para insistir en que «las empresas somos parte de la solución, no del problema». «Es difícil que en momentos complicados las empresas puedan seguir aguantando cuando lo que se pone son trabas de tipo administrativo y de tipo fiscal», ha sentenciado el líder de los empresarios españoles, que ha apuntado a que «lo más importante es la estabilidad, y el diálogo desde la moderación. Cuando hay estabilidad, hay confianza y eso atrae inversión».
Previo al discurso de Garamendi y Merry del Val, Anged y la consultora Lasker han presentado los resultados de una encuesta a 100 directivos y profesionales del mundo empresarial: un 51% de los encuestados cree que para recuperar la confianza de las empresas hay que garantizar unas reglas de juego claras, previsible y ágiles, y un 45% aboga por simplificar las cargas burocráticas y los trámites para aumentar la productividad. Además, en cuanto al mercado laboral, un 37% cree que hay que seguir avanzando en la flexibilidad para adaptarse mejor a los cambios y un 31% ve necesario mejorar el sistema educativo y universitario para incorporar nuevos perfiles.
